Este es el tercer libro que leo de este autor, los dos primeros dejaron la vara demasiado alta y tal vez sea por eso que en esta ocasión le he dado solo tres estrellas.

El libro, como siempre es muy bueno, Eddie Flynn es sin duda un gran protagonista y cada libro me cae mejor, aunque sigo muy pero que muy enojada porque la editorial decidiera comenzar con el cuarto libro de serie para su traducción, en fin, el caso es que el nivel de acción y de trama es bastante bueno, todo el libro me tuvo con el Jesús en la boca, literal, sufrí mucho al leer este libro, tanta maldad que para nuestra enorme desgracia no está muy lejos de la realidad.

La razón por la que le he puesto solo tres estrellas es que en mi opinión nos pasamos 3/4 partes del libro leyendo como los malos iban ganando, por mucho que avanzaba en mi mente no había posibilidad alguna de que Flynn y su gente lograrán salir adelante con todo lo que les sucedía,

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el fiscal, el Sheriff, la policía local, la gente del pueblo, parecía que todos estaban coludidos y todos corruptos,

nadie, absolutamente nadie hacía nada por hacer lo correcto o hablar o levantar la voz, simplemente todos ahí odiaban a Flynn a su defendido y fue absolutamente agobiante de leer.

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Me he pasado la mayor parte del libro pensando en que tenían que ver los hechos que se narraban con el caso que Flynn había ido a trabajar, es que no tenía sentido más allá de que el acusado fuera negro, pero no entendía porque tantas molestias para tratarlo como lo hacían, las molestias para hacerlo culpable y que le dieran la pena de muerte, todo eso no tenía nada que ver con lo que hacía "El Pastor" y todo el rollo de supremacía blanca, no encontraba el hilo conductor, para ser honesta cuando esto se desvela, que dicho sea de paso, es casi al final del libro, pues me pareció poco creíble y un argumento muy endeble, por la sinopsis llegue a pensar que al final el culpable sería el fiscal o el juez, en fin, no está mal el libro pero me quedo a deber

para el último tercio del libro simplemente todo empieza a enderezarse, Flynn de la nada y digo de la nada porque durante la mayor parte del libro no dio pistas de que tuviera pruebas a favor de su defendido o que tuviera algo para probar lo que todos sabíamos que había sucedido, así que su magia en el juicio no me lleno tanto en esta ocasión, simplemente todo se resolvió, de repente ya tenía ayuda federal y todo se resuelve.

Demasiadas muertes en mi opinión porque la manera en que los federales solucionaron todo no es precisamente algo que me hubiera hecho sentir bien, al final el mensaje es que todos son corruptos y asesinos.

Un buen libro, pero no la pase muy bien para ser honesta, es una historia dura y cruda y avanzar y avanzar y ver que parece que esto no tiene solución alguna es angustiante.